Desafío 7 : La nación de Dios

34. David y Saúl

¿Te resulta fácil pensar en los demás primero y ponerlos en primer lugar?

Cuando alguien no es muy amable con nosotros, es natural querer devolverle el mismo afecto. Pero, ¿y si hiciéramos lo contrario?

Piensa en alguien con quién no te llevas bien. ¿Qué crees que haría si cuando él no es amable contigo, tú lo fueras con él?
David y Saúl
Empieza el reto encontrando y leyendo este versículo en la Biblia: 1 de Samuel 24:11b.

La Historia hasta ahora

Saúl se convirtió en rey, y al principio, conquistaba a los enemigos exitosamente. Pero el éxito le hizo volverse arrogante, pensando que era el único inteligente y sabio. El hijo de Saúl, Jonatán, tenía un muy buen amigo: David. David era un joven corriente que cuidaba las ovejas de su padre. Debido al pecado de Saúl, Dios eligió a David como próximo rey, no a Jonatán ni a ninguno de sus hermanos, ni aunque lo normal fuera que los hijos heredaran el trono después del padre.
Cuando David ganó la batalla contra Goliat, y más tarde otras victorias, una tras otra contra los filisteos, la gente encontró a David diez veces mejor que Saúl. Saúl sintió envidia e intentó matar a David, pero David escapó, y durante muchos meses Saúl lo persiguió queriendo hacerle daño.

1 Samuel 24:1-12

Ahora leed juntos 1 Samuel 24:1-12.

Qué sigue después

Después de esto, Saúl entendió que David realmente le había perdonado la vida y que él sería el próximo rey. David le prometió a Saúl que no se vengaría de sus hijos cuando Saúl muriera. (Los reyes a menudo hacían eso para deshacerse de toda la competencia).
David podía haberse vengado pero decidió no hacerlo! Eso fue porque confiaba en lo que Dios le dijo sobre su propio futuro.

Explora la Biblia

Contestad juntos las preguntas de El Gran Desafío de la Biblia de la página 48.

¿Sabías que?

Armas Era la Edad de hierro, y las espadas, las dagas, los escudos y las lanzas estaban hechas de hierro. ¡No había herreros en Israel y los soldados tenían que ir a los filisteos para afilar o reparar sus armas!

David, el forajido El rey Saúl envidiaba a David y este tuvo que escapar. Dirigió una banda de forajidos, vivía en el desierto y siempre estaba huyendo de Saúl y su ejército.

La muerte de Saúl David no hirió a Saúl, pero más tarde este murió en una batalla. David estaba tan afectado cuando oyó la noticia que rasgó su ropa, lloró y no comió. Escribió una canción en la que dice que Saúl era un ‘héroe famoso’ y un ‘guerrero poderoso’. Puedes leerlo en 2 Samuel 1.

 

Habla con Dios

¿Hay alguien que te haga sentir furioso, celoso o asustado? Habla con Dios sobre por qué y cómo te hacen sentir de esa manera. Pídele a Dios que te ayude a tratarlos bien.

Hablemos

Esto es lo que pasó cuando Ruth y su profe de escuela dominical, Elaine, leyeron esta historia de la Biblia, juntas.

Ruth y su hermana gemela Sarah van a una pequeña escuela dominical al norte de Gales.
Ruth preguntó: “¿Por qué ir al baño en una cueva, y por qué estaba David atrás? Y por qué cortó un trozo de ropa?

Elaine contestó: “Una cueva sería privada. Las cuevas en esa parte del país eran enormes, por lo que podrían caber cientos de personas. David probablemente se estaba escondiendo en la parte más profunda ya que sabía que Saúl lo estaba buscando para matarlo. Fue mala suerte que Saúl y su ejército entraran en la misma cueva. Cortó un trozo de la túnica de Saúl para mostrar lo fácil que hubiera sido matarlo: se había acercado tanto…Pero descubrió que no podía matar a Saúl, aunque algunos de sus seguidores quisieran, porque Saúl era el rey. Tengo la sensación (tendré que buscarlo cuando llegue a casa) de que la capa de una persona era bastante especial, así que cortar un trozo tenía algún tipo de significado especial.

¿Qué dirías tú?

La amiga de escuela dominical de Ruth habló sobre esta historia:

Lily pensó: “sería triste matar al rey.”


Sarah dijo: “David era valiente; se defendió cuando salió a hablar con Saúl.”


Nathan y Max pensaron que la parte del baño era graciosa.

Eve sabía que: “David no pudo matar al rey porque sino Dios se enfadaría con él”.
Ruth se preguntaba: “¿Guardó David el trozo de tela?”
Sarah sugirió: “¡Quizás Saúl lo recuperó!

Pruébalo

Inténtalo.
Imagina que eres David y que te están entrevistando para las noticias de la TV. Pídele a tu entrenador de la Biblia que sea el entrevistador.

¿Cómo responderías a estas preguntas?:
• ¿Cómo te sentiste cuando estabas huyendo de Saúl?
• ¿Pudo Samuel haber cometido un error cuando te ungió como el próximo rey?
• ¿Qué elección tuviste que hacer cuando estabas en la cueva y entró Saúl?
• ¿Por qué no mataste a Saúl?
• ¿Cómo supiste qué era lo correcto?
• ¿Cómo te ayudó Dios?

Deja de ser David ahora, y haceros las siguientes preguntas:
• ¿Cómo nos ayuda Dios a tomar las decisiones correctas?
• ¿Se te ocurre algún momento en que Dios te ayudó a elegir lo correcto aunque no fuera fácil?