Desafío 7 : La nación de Dios

35. El rey David

¿En qué puedes pensar, que dure casi nada?

¿En qué puedes pensar, que dure para siempre?

¿Cuánto tiempo crees que es ‘para siempre’?
El rey David
Empieza el reto encontrando y leyendo este versículo en la Biblia: 2 Samuel 7:16.

La Historia hasta ahora

La historia de Saúl tiene un final triste. El hombre que comenzó como profeta, se alejó de Dios, e incluso fue a ver a una adivina para saber qué hacer. Dios no le volvió a hablar. Saúl murió mientras luchaba en una gran batalla, y tres de sus hijos murieron con él.
Después de esto, David fue a diferentes partes del país para ser aceptado como rey por los demás, y tuvo éxito.
David trajo el arca del Pacto, el símbolo de la presencia de Dios, a Jerusalén, donde quería construir un templo para el Dios viviente.

2 Samuel 7:1-13

Ahora leed juntos 2 Samuel 7:1-13.

Qué sigue después

Tal vez no fue fácil para David, aceptar que Dios rechazó sus planes de construcción, pero él no protestó, en vez de eso alabó a Dios por su grandeza. David estaba muy contento de que Dios le prometiera ayudarlo a ser un buen rey.
Después de esto, la gente se unió contra sus enemigos, y David fue un rey victorioso durante mucho tiempo. Hizo un buen trabajo y fue un rey importante para Israel. Cuando los profetas del Antiguo Testamento hablan sobre el futuro reino y el Rey Salvador Jesús, prometen que será descendiente de David.

Explora la Biblia

Contestar las preguntas del Gran Desafío de la Biblia, página 48, juntos.

¿Sabías que?

Dos veces rey Cuando Saúl murió, David fue nombrado rey de una parte del país, en un lugar llamado Hebrón, en la zona sur de Judá. Más tarde, el resto del país le pidió que fuera su rey también.

Jerusalén David hizo de Jerusalén la capital del país. Organizó que trajeran el arca del Pacto a la ciudad y también construyó un palacio para sí mismo. Jerusalén a veces era llamada la “ciudad de David”.

Templo David quería construir un templo en Jerusalén donde las personas pudieran adorar a Dios. Dios no se lo permitió, pero dijo que el hijo de David construiría uno.

 

Habla con Dios

Pídele a Dios que te ayude a tenerle siempre en tus pensamientos y a recordar todo lo que hace por ti.

Pruébalo

Dios ‘bendijo’ a David (le hizo muy feliz) cuando le dijo que alguien de su familia sería rey para siempre. Cualquier cosa que nos ayude a confiar más en Dios es probable que nos haga felices. ¿Por qué? Porque el que más nos bendice es Dios. ¿Tienes algún ejemplo en el que fuiste ‘bendecido’ por Dios? ¿Te hizo feliz?
Haz una ‘caja de bendiciones’. Encuentra una caja pequeña y decórala con papel de colores o pegatinas. Recoge botones grandes o cualquier cosa similar. Empieza a pensar en cosas por las que dar ‘gracias’ a Dios. Cada vez que se te ocurra alguna, pon uno de esos objetos en la caja y di cómo te bendijo Dios, y cómo te hizo feliz (“bendito”).
¡Si tienes demasiados “gracias”, saca los objetos de la caja y empieza de nuevo!